En muchas casas se celebra la navidad con una cena el 24 de diciembre, existe el árbol con decoración navideña, se preparan típicos platillos como: pavo, romeritos, jamón horneado, pollo en mole, y tamales entre otros, también se acompañan de bebidas tradicionales de esta época como el famoso ponche de navidad.
Los comerciantes y sus empleados que se quedan hasta altas horas de esa noche trabajando lo celebran hasta el 25 con una comida, pero Independientemente de que religión se profese, y las personas que no creen en religiones las fiestas decembrinas nos ofrecen grandes oportunidades de reflexión, de crecimiento personal, y de humanismo que tanto necesitamos en esta época donde cada día nos deshumanizamos y nos apegamos al frio mundo cibernético.
Estas fiestas nos sirven a toda clase de persona, de cualquier religión y clase social, aquí lo importante es que se viva la unión familiar, los valores, sentir que no estamos solos,
que existen seres humanos familiares o amigos que te aman, que son solidarios contigo y no solo en las fiestas, sino todo el año.
Es nuestra oportunidad de poner un alto a nuestra vida y reflexionar, ¿ como quiero trascender en la gente que me rodea? Y pensar si estoy haciendo lo correcto para que así sea, porque si quiero trascender como un ser humano honesto, trabajador y amoroso y si esto no lo llevo a la práctica, definitivamente no voy a trascender en ellos así.
También en esta época nos invita a reflexionar en nuestras prioridades, y nuestro modo de vivir, ejemplo de esto : “los ricos que se comportan como pobres” y los opuestos : “los pobres que se comportan como ricos”, actualmente existe un modo de vida muy competitivo, traer el mejor carro, el más reciente celular, la más avanzada pantalla de TV, vestirse con prendas de ropa carísimas, etc. No debemos por nuestra salud mental caer en el juego “yo tengo más que tu”, observo a los padres de familia comprando unos regalos demasiado costosos a sus pequeños y jóvenes hijos y me pregunto: ¿será necesario?, ¿se lo exigió el hijo, o los padres quieren que su hijo sobresalga con lo mejor con sus amiguitos?.
Es tiempo de valorar la dignidad humana, estar conscientes del valor de cada persona que nos rodea, sea quien sea. Respetarnos y promover los verdaderos derechos humanos, es sensibilizarnos ante la pobreza, remediar lo que tengamos al lado, aprender a compartir con el necesitado, no esperar que las autoridades de gobierno las solucionen, nosotros podemos solucionar lo de alrededor.
No caer en el consumismo, es sorprendente como hemos caído en el juego de comprar y comprar, cuando en realidad estas fechas son para: reunión familiar, reflexionar, y dar y recibir amor, recuerdo que siempre mi madre nos regalaba en navidad además de pocos juguetes, un suéter, o una bufanda, o calcetines, o un chaleco, o un par de guantes, o una cobija hecha con sus propias manos, y no solo a su familia también sus amigas recibían algo hecho por ella. Creo que ese tipo de regalo es más valioso que el celular más avanzado en el mercado, porque era su tiempo, su esfuerzo, su creatividad, y su amor hacia cada una de las personas que ella amaba.
FRASE:
Las fiestas de diciembre deben de traer un mensaje de unión, amor, paz, y solidaridad, no caer en el consumismo, regale lo que si tiene, lo que le salga del corazón, puede ser un gran abrazo, una sonrisa, un beso, regale paz y serenidad.
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